PRUEBAS FUNCIONALES
MONITORIZACION FETAL ANTEPARTO (Non Stress Test)
Es un método complementario de diagnóstico que forma parte de la rutina del control del embarazo a partir de la semana 36, aunque en embarazos patológicos se la puede realizar desde la semana 32. Se lo efectúa electrónicamente mediante la interpretación del trazado en un papel que detalla el comportamiento del ritmo cardiaco, los movimientos fetales y las contracciones uterinas en un periodo de tiempo que oscila entre 20 y 40 minutos.
El resultado reactivo o tipo I, es indicador de salud fetal permitiéndonos seguir con la evolución del embarazo. Un resultado no reactivo o tipo II, es sospechoso de alguna alteración a nivel de la oxigenación fetal y es indicativo para realizar pruebas de extensión.
PERFIL BIOFISICO (PBF)
Es una prueba que generalmente se la realiza en el tercer trimestre de embarazo y que combina un test sin stress (ver monitorización fetal anteparto) y cuatro parámetros fetales identificados ecográficamente: Los movimientos respiratorios, los movimientos, el tono y el volumen de líquido amniótico. A cada parámetro se le asigna 2 puntos para un total de 10 puntos.
La interpretación se determina mediante la adición del puntaje para cada parámetro, siendo:
Normal: 8-10
Dudoso: 6
Anormal: < 4
Los resultados dudosos requieren pruebas complementarias para valoración del bienestar fetal. Los resultados anormales son indicadores de terminación del embarazo.